MÁS ALLÁ DEL VOLUNTARIADO: EL PODER DE UNA MANO AMIGA

El voluntariado es una fuerza transformadora, y la historia de Maribel Nievas, voluntaria de acompañamiento en Fundación San Blas, es un claro ejemplo de ello. En este vídeo, Maribel nos comparte su inspirador testimonio y nos ofrece una mirada profunda y humana sobre la labor de la entidad, el colectivo sinhogarismo y su gratificante experiencia como voluntaria.

Un compromiso después de la jubilación

Tras su jubilación, Maribel buscaba una forma de dedicar su tiempo a una causa con un propósito claro y humanitario. Encontró en Fundación San Blas la oportunidad perfecta para contribuir, motivada por los objetivos realistas de la entidad y el impacto directo que tienen en la vida de las personas.

Más que un lugar para dormir: Un camino de regreso a la vida

Según Maribel, el propósito de Fundación San Blas es mucho más que simplemente ofrecer un techo y comida. La entidad se centra en brindar un refugio y, lo más importante, una mano amiga y la orientación necesaria para que las personas puedan recuperar sus vidas. Acompañar a las personas a citas médicas o ayudarles con gestiones administrativas son algunas de las tareas que realiza Maribel, demostrando que el voluntariado no requiere habilidades específicas, solo el deseo de ayudar.

Derribando mitos sobre el sinhogarismo

Maribel desafía las ideas erróneas comunes sobre las personas que viven en la calle. Para ella, son personas «invisibles» para la sociedad, y su situación es el resultado de problemas más profundos, como la falta de apoyo familiar o problemas de salud física y mental. Su testimonio destaca la importancia de un apoyo integral frente a las ayudas esporádicas.

La recompensa de dar

Maribel nos enseña que la recompensa del voluntariado va más allá de lo que se da. Ella considera que el mayor pago es la satisfacción personal que recibe, recordando con especial cariño la vez que acompañó a un joven a hacer la compra de su primer sueldo. Su relato es un recordatorio de que el voluntariado es una vía de doble sentido, en la que tanto el que da como el que recibe se enriquecen.

Te invitamos a ver el vídeo y a conocer de primera mano el conmovedor testimonio de Maribel.

Si te ha gustado, comparte en tus redes:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *